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Los pestiños son un dulce típico de Andalucía, donde tienen un protagonismo especial durante la Semana Santa. Durante varios años el pestiño se ha elaborado con aceites de otro origen, pero ahora es tendencia hacerlos con Aceite de Oliva Virgen Extra fresco. Este ingrediente va a potenciar todos los sabores del pestiño, aportando un extra de salud.
Lo cierto es que el aceite de oliva fresco es la mejor opción a la hora de cocinar, no sólo por las propiedades beneficiosas que nos aporta, también por su rendimiento en cocina para este cualquier tipo de recetas.
Por eso hoy vamos a realizar este delicioso dulce con nuestro Miluma BIO, aceite de oliva virgen extra proveniente de agricultura ecológica y sostenible. Este aceite destaca por una mayor presencia de Vitamina E natural, superior a la de otros aceites de oliva virgen extra.
Ingredientes
• Aceite de oliva Virgen Extra Miluma BIO para lograr un sabor único.
• Harina, 500gr
• Vino blanco, 150ml
• 1 Cáscara de limón
• 1 Cáscara de naranja (opcional)
• Un chorrito de anís
• Canela en polvo
• Azúcar y miel
Tiempo de preparación
10 minutos
Personas
Para 4
Elaboración
En primer lugar, prepararemos la masa. Ponemos el aceite de oliva virgen extra Miluma BIO en una sartén junto con la cáscara de limón y el chorrito de anís para aromatizar el aceite. Si lo deseamos podemos añadir también una cáscara de naranja, aunque en nuestra receta tradicional sólo lo utilizamos una cáscara de limón. Pasados pocos minutos, cuando el aceite esté caliente, lo retiramos del fuego y lo dejamos enfriar.
A continuación, en un bol grande, echamos la harina y el aceite que acabamos de calentar (una vez esté frío). Añadimos el vino blanco y una pizca de sal. Comenzamos a amasar hasta conseguir una masa fina y homogénea, que pueda ser trabajada fácilmente. Para esta tarea podemos solicitar la ayuda de los más pequeños. Una vez conseguida la masa, la cubrimos con un paño y la dejamos reposar durante media hora.
Es necesario amasar hasta conseguir una masa fina y ligera
Extendemos bien la masa sobre la encimera con la ayuda de un rodillo y la cortamos en tiras de unos 4 centímetros de ancho.
Seguidamente cortamos las tiras para obtener formas cuadradas. Ahora comenzaremos a darle forma a los pestiños, doblando las puntas hacia dentro y pegándolas con un poco de agua o presionándolo un poco con el dedo.
Los dejamos reposar unos 20-30 minutos y los freímos en una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra. Una vez estén fritos por ambas caras, los retiramos y los dejamos escurrir sobre un plato y papel de cocina.
Decoración
La decoración de los pestiños es la parte más imaginativa pero, como comentábamos al principio, vamos a optar por las dos opciones más tradicionales que conocemos:
- Miel: Con la ayuda de una cucharita bañamos ligeramente los pestiños con miel.
- Azúcar y canela: En un bol mezclamos azúcar blanca y un poco de canela en polvo. Una vez retiremos los pestiños de la sartén, los espolvoreamos con esta mezcla y ¡listo!
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